NO ES LO MISMO BARRIO QUE DISTRITO, NO ES LO MISMO.

marzo 18, 2025 0 Por Javier

No es lo mismo barrio que distrito, no es lo mismo

José Antonio Prades

José Antonio PradesEscritor

08/mar/25 – 09:21

Las definiciones de las palabras pueden ser múltiples y cada uso queda delimitado por una connotación propia. Es el caso concreto de determinados sinónimos que, según norma gramatical, podrían ser usados indistintamente, pero que, por ese uso citado, a veces marcado por una ley, ordenanza, reglamento o normativa, deben ceñirse, en aras de la precisión, a significados diferentes. “Distrito” sería sinónimo de “Barrio”, según la RAE (aunque curiosamente, no lo refiere en viceversa), pero el Excelentísimo Ayuntamiento de Zaragoza, en su extensa normativa, marca distinciones de uso a ambos términos. Así, el Reglamento de Órganos Territoriales y Participación Ciudadana dice:

 “Los Distritos del término municipal de Zaragoza son divisiones territoriales propias, dotadas de órganos de gestión desconcentrada denominados Juntas Municipales y Juntas Vecinales, para impulsar y desarrollar la participación ciudadana en la gestión de los asuntos municipales y su mejora, sin perjuicio de la unidad de gobierno y gestión del municipio. En el término municipal de Zaragoza se asientan dieciséis distritos”, quince municipales y “el Distrito Rural, que comprende los catorce barrios rurales…” En Wikipedia, la entrada “Distritos de Zaragoza” incluye los barrios que cada uno de ellos contiene, con el error sobre el barrio de Montemolín (Bajo Aragón), que lo presenta incluido solo en el distrito de Las Fuentes, cuando la mitad, aproximadamente, de su territorio se asienta en el distrito de San José.

A las instituciones y a los medios de comunicación debemos exigirles precisión en el uso de términos, dado que deben convertirse en modelos de actitud o en creadores de opinión con la mayor objetividad posible.  En el caso que titula este artículo, “barrio” versus “distrito”, es habitual comprobar confusiones en ambos colectivos que, referidos a Montemolín, al ser un barrio dividido en dos distritos, resulta especialmente incorrecto y además doloroso emocionalmente para sus habitantes, que se ven asignados a otros “barrios”, es decir, como si a los aragoneses nos dijeran que formamos parte de Cataluña o de Navarra.  Y no es eso. 

Las palabras tienen connotaciones aplicadas según los pueblos que las usan, ya sea una comunidad de vecinos, una región o un país. “Barrio”, en el alcance español, connota un aspecto de pertenencia equivalente a pueblo o ciudad con determinados aspectos comunes, derrocha solidaridad y convivencia.  “Distrito”, incluso como alcance internacional en diferentes idiomas, connota una delimitación administrativa, con menor, o ningún, aspecto emocional ni social.  Los distritos quedan referidos a la gestión, y están desprovistos de la emocionalidad citada.  Es lo mismo que pasa con Nación y Estado (Josi dixit). En Zaragoza, por ejemplo, no hay Asociaciones Vecinales de distritos, sino de barrios, aunque en ocasiones, el error primigenio de denominar a los distritos con nombres de barrios ha generado esas confusiones, unas veces inconscientes por proceder rutinariamente sin la correcta documentación, otras intencionadas con deseo de equivocar al interlocutor.

El error en 1981 de dividir un barrio en dos distritos debe ser subsanado en la próxima redistribución, debido a varios de los principios citados en el dicho Reglamento como, por ejemplo, los de eficacia y coordinación.